Bio­parc Valen­cia es un par­que que cuen­ta con acce­si­bi­li­dad para todos sus públi­cos en todo su reco­rri­do y que incor­po­ró ele­men­tos como los ban­cos de apo­yo isquiá­ti­co para ofre­cer una visi­ta más con­for­ta­ble. Asi­mis­mo pre­sen­ta la ven­ta­ja para los dis­ca­pa­ci­ta­dos que tie­nen un des­cuen­to del 15%, sim­ple­men­te acre­di­tan­do* su situa­ción. Ade­más, para aque­llos que nece­si­ten la asis­ten­cia de una per­so­na para poder visi­tar el par­que, su acom­pa­ñan­te acce­de gra­tis. Las con­di­cio­nes son: que su gra­do de dis­ca­pa­ci­dad sea igual o supe­rior al 65%; que sea infe­rior al 65% pero se haya reco­no­ci­do la movi­li­dad redu­ci­da o la ayu­da de 3ª per­so­na; que el gra­do de inca­pa­ci­dad per­ma­nen­te sea de gran inva­li­dez; tener reco­no­ci­do el gra­do de depen­den­cia.

Por otra par­te, tam­bién está per­mi­ti­do el acce­so de perros guía de las per­so­nas invi­den­tes y perros de asis­ten­cia, pre­sen­tan­do siem­pre las corres­pon­dien­tes acre­di­ta­cio­nes. Por las carac­te­rís­ti­cas de Bio­parc, estas visi­tas requie­ren una espe­cial aten­ción y nor­mas espe­cí­fi­cas, por lo que se reco­mien­da con­tac­tar pre­via­men­te con el par­que con el obje­ti­vo de agi­li­zar y faci­li­tar al máxi­mo la entra­da.

Y para que todo tipo de públi­cos acce­dan a la expe­rien­cia que supo­ne la zoo­in­mer­sión se pre­sen­tan dis­tin­tas opcio­nes de pre­cio, des­de la entra­da de día al pase anual B!, o las con­di­cio­nes espe­cia­les para gru­pos de más de 20 per­so­nas y una pro­pues­ta exclu­si­va de tari­fas para los gru­pos esco­la­res o para los mayo­res de 65 años. Tam­bién pue­den dis­fru­tar de ven­ta­jas espe­cí­fi­cas del 15% de des­cuen­to sobre el pre­cio de la entra­da las fami­lias nume­ro­sas, las fami­lias mono­pa­ren­ta­les, los meno­res de 25 años y los pen­sio­nis­tas.

Bio­parc Valen­cia sigue tra­ba­jan­do para con­cien­ciar a tra­vés de la visi­ta y la emo­ción que ésta pro­du­ce, para que todos com­pren­da­mos la impor­tan­cia de cam­biar nues­tras con­duc­tas por otras más res­pon­sa­bles con el medio ambien­te.