[vc_row full_width_row=“true”][vc_column][vc_column_text]En cier­to modo, La Divi­na Come­dia de Dan­te Alighie­ri es el tex­to fun­da­cio­nal de la lite­ra­tu­ra euro­pea; en opi­nión de algu­nos teó­ri­cos, La tie­rra bal­día de T.S. Eliot fue su cer­ti­fi­ca­do de defun­ción; ese poe­ma fue un espe­jo de la Pri­me­ra Gue­rra Mun­dial, en cuan­to sui­ci­dio de Euro­pa como un mode­lo de civi­li­za­ción.

 

Por­ta­da del libro “La tie­rra bal­día”, edi­ta­do por la valen­cia­na Olé Libros.

 

Un refunfuño

The was­te land (La tie­rra bal­día) es un poe­ma de 435 ver­sos, la mayo­ría ver­sos libres, y al que el pro­pio Eliot cali­fi­có como un “refun­fu­ño rít­mi­co”. Cons­ti­tu­ye una suer­te de puzz­le refe­ren­cias expli­ci­tas o vela­das a tex­tos bíbli­cos, los Upa­nis­chad, Dan­te, el tea­tro isa­be­lino, los sim­bo­lis­tas fran­ce­ses, Wag­ner, Petro­nio, Home­ro, Ovi­dio, San Agus­tín, los poe­tas meta­fí­si­cos ingle­ses, las obras de mitó­lo­gos como James Fra­zer Y Jes­sie Wes­ton…

Como obser­va Sanz Irles, tra­duc­tor de este tex­to “a pesar de tan impre­sio­nan­te dis­per­sión de reta­zos, cas­co­tes y añi­cos (como los escom­bros que espar­cie­ra el esta­lli­do de una bom­ba) por deba­jo de ella el poe­ma posee una espec­ta­cu­lar uni­dad que todo buen lec­tor per­ci­be: la cla­ve de bóve­da de tal uni­dad es, pre­ci­sa­men­te, su fas­tuo­sa sono­ri­dad”.

 

Artefacto sonoro

 

El poe­ta, dra­ma­tur­go y crí­ti­co lite­ra­rio bri­­tá­­ni­­co-esta­­dou­­ni­­de­n­­se, T.S. Eliot.

Inclu­so con un cono­ci­mien­to esco­lar del inglés y des­co­no­cien­do su abru­ma­do­ra eru­di­ción, impre­sio­na el enig­má­ti­co rit­mo del poe­ma de Eliot.

En cuan­to a las solu­cio­nes apor­ta­das por Sanz, todo hace pen­sar que habrá elio­tó­lo­gos muy gra­ta­men­te sor­pren­di­dos, y tam­bién otros que expe­ri­men­ta­rán ner­vio­sas pal­pi­ta­cio­nes por solu­cio­nes tan desusa­das. Y está bien que así sea.

 

Una exquisita edición de Olé Libros

La exqui­si­ta edi­ción rea­li­za­da por la edi­to­rial valen­cia­na Olé Libros, inclu­ye cin­co tex­tos: el poe­ma ori­gi­nal de Eliot, la tra­duc­ción de Sanz Irles, así como un Pró­lo­go del escri­tor Ernes­to Her­nán­dez Bus­to, un Epí­lo­go del crí­ti­co José Anto­nio Mon­tano y una Nota del pro­pio tra­duc­tor. Esta últi­ma resul­ta espe­cial­men­te intere­san­te. Sanz Irles (Valen­cia, 1952) no es tra­duc­tor pro­fe­sio­nal ni pro­fe­sor de lite­ra­tu­ra ingle­sa. Es un escri­tor sol­ven­te y un poe­ta apa­sio­na­do por un tex­to al que dedi­có bue­na par­te de dos años de su vida. El ori­gen de esa tarea hay que bus­car­lo en el iti­ne­ra­rio que le lle­vó “del des­con­cier­to al embru­jo” cuan­do muy joven leyó  por pri­me­ra vez La tie­rra bal­día.

 

“He vivi­do ins­ta­la­do en el poe­ma todo este tiem­po y creo haber sido un buen inqui­lino: he paga­do el alqui­ler todos los meses y me he esfor­za­do en hacer los meno­res daños posi­bles”.

Sanz Irles: Tra­duc­tor de “La tie­rra bal­día”.

Para des­cri­bir el entu­sias­mo y su con­vi­ven­cia con el poe­ma duran­te esos dos años, emplea un deli­cio­so símil: “he vivi­do ins­ta­la­do en el poe­ma todo este tiem­po y creo haber sido un buen inqui­lino: he paga­do el alqui­ler todos los meses y me he esfor­za­do en hacer los meno­res daños posi­bles”.

Uti­li­za como guías para su tra­ba­jo ‑ade­más de con­sul­tar la vein­te­na de tra­duc­cio­nes exis­ten­tes en cas­­te­­llano- las inter­pre­ta­cio­nes que en su momen­to hicie­ron de la obra, Octa­vio Paz, Ezra Pound (casi coau­tor del poe­ma) y el pro­pio T.S. Eliot.

 

Tornillería compositiva

 

El cua­dro “El triun­fo de la muer­te”, de Brueghel el Vie­jo.

Sanz pos­tu­la solu­cio­nes afor­tu­na­das a la com­ple­ja tor­ni­lle­ría métri­ca y rít­mi­ca de The was­te land. Un ejem­plo: “que año tras año la rata tro­ca en sona­je­ro con sus patas” (“rattled by the rat´s foot only, year to year”)

Sono­ri­dad, inter­tex­tua­li­dad y frag­men­ta­ción son las tres gran­des carac­te­rís­ti­cas de la obra, según Sanz. Y la arga­ma­sa que uni­fi­ca todo este des­gua­za­do tex­tual, su musi­ca­li­dad hip­nó­ti­ca.

Sanz Irles ha apli­ca­do a la tarea de tra­duc­ción el pre­cep­to agus­tiano de “ama y haz lo que quie­ras”. Su amor es inte­li­gen­te, docu­men­ta­do y res­pe­tuo­so con la obra de Eliot. El fru­to de esa devo­ción admi­ra­ble con­mue­ve.

 

Título: “La tierra baldía”

Autor: T.S.Eliot

Edi­to­rial: Olé­li­bros

Pre­cio: 20 euros

Tra­duc­tor: Sanz Irles

Pági­nas: 109

[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]

Comparte esta publicación

amadomio.jpg

Suscríbete a nuestro boletín

Reci­be toda la actua­li­dad en cul­tu­ra y ocio, de la ciu­dad de Valen­cia