L’e­lec­te, que se estre­na­rá en el Tea­tro Talía el pró­xi­mo miér­co­les 4 de sep­tiem­bre, es uno de los pla­tos fuer­tes de la tem­po­ra­da tea­tral. Dos gran­des acto­res en el esce­na­rio, Alfred Picó y Josep Manel Casany, y una come­dia con mucha miga son las car­tas de pre­sen­ta­ción  de esta obra, que podrá dis­fru­tar­se has­ta el 22 de sep­tiem­bre.

Se dice que la polí­ti­ca tie­ne mucho de tea­tro, y en esta obra con tex­to de Ramón Madau­la vemos un apa­sio­nan­te due­lo de esgri­ma dia­léc­ti­ca entre sus dos pro­ta­go­nis­tas. La nue­va pro­duc­ción de L’Horta Tea­tre lle­ga al Tea­tre Talia de Valen­cia, con ver­sión de Juli Dis­la y tex­to en valen­ciano, tras su exi­to­so pre­es­treno en la Sala L’Horta den­tro del Fes­ti­val Som_Riure el pasa­do mes de mayo y en la Mos­tra de Tea­tre d’Alcoi.

Alfred Picó defi­ne L’e­lec­te como “una come­dia dra­má­ti­ca, con momen­tos diver­ti­dos, pero que tam­bién invi­ta a la refle­xión”. “Podría­mos decir que es un espec­tácu­lo de escu­char, tru­fa­do de son­ri­sas”, aña­de.

La acción se sitúa momen­tos antes de una inves­ti­du­ra, recrean­do la con­ver­sa­ción de un can­di­da­to que ha gana­do las elec­cio­nes con su psi­có­lo­go. Un ins­tan­te que el polí­ti­co apro­ve­cha para pen­sar en qué le ha lle­va­do has­ta ese pun­to. “Tal vez no nos para­mos a mirar­lo de esta mane­ra, pero gober­nar es una res­pon­sa­bi­li­dad enor­me, que te hace pen­sar cuál es el estí­mu­lo, la razón por la cual una per­so­na se plan­tea diri­gir algo tan com­ple­jo como un esta­do, una auto­no­mía o una ciu­dad. Dudas de si es una cues­tión de ambi­ción eco­nó­mi­ca o de ansia de poder, si pien­san en el bien común, si solo quie­ren pro­ta­go­nis­mo…”, comen­ta el pro­duc­tor de la pie­za.

Juli Dis­la ha hecho la ver­sión, ‘valen­cia­ni­zán­do­la’ para que las expre­sio­nes, per­so­na­jes y situa­cio­nes sean más pró­xi­mas para los espec­ta­do­res de la Comu­ni­tat Valen­cia­na. “Es un equi­po con el que hemos rea­li­za­dos muchas come­dias, hay mucha sin­to­nía, y pen­sa­mos que eso se aca­ba tras­la­dan­do a la pues­ta en esce­na por­que hay un cli­ma espe­cial”, con­fie­sa Picó.

A tra­vés de esta come­dia se va des­cu­brien­do que los polí­ti­cos tam­bién son per­so­nas y que, muchas veces, solo son títe­res de otros o de la situa­ción. “Es curio­so que, con­for­me avan­za la obra, lle­gas a sen­tir empa­tía con ellos, como cuan­do a veces te pare­ce sim­pá­ti­co el malo de la pelí­cu­la”, se ríe Picó.

Des­de L’Horta Tea­tre avan­zan la posi­bi­li­dad de que los espec­ta­do­res encuen­tren simi­li­tu­des con epi­so­dios o per­so­na­jes que han sido noti­cia. Aun­que no han bus­ca­do refle­jar nin­gún hecho o per­so­na en con­cre­to, saben que el públi­co pue­de encon­trar situa­cio­nes que le pare­ce­rán fami­lia­res y que es fácil que las aso­cien a aque­llo que han vivi­do de cer­ca, la polí­ti­ca valen­cia­na. Pero, de hecho, el tex­to está escri­to por el actor cata­lán Ramón Madau­la, se tra­ta de su pri­me­ra obra y ha dado ple­na liber­tad a la com­pa­ñía valen­cia­na a la hora de la pues­ta en esce­na.

Comparte esta publicación

amadomio.jpg

Suscríbete a nuestro boletín

Reci­be toda la actua­li­dad en cul­tu­ra y ocio, de la ciu­dad de Valen­cia