El equi­li­brio entre esté­ti­ca y fun­cio­na­li­dad es más que una cues­tión de dise­ño: es una inver­sión inte­li­gen­te para evi­tar refor­mas fre­cuen­tes, redu­cir cos­tes de man­te­ni­mien­to y maxi­mi­zar la ren­ta­bi­li­dad del alo­ja­mien­to.

 

 

La deco­ra­ción en una vivien­da de alqui­ler vaca­cio­nal no solo debe ser atrac­ti­va, tam­bién debe sopor­tar el uso cons­tan­te y, a menu­do, poco cui­da­do­so de hués­pe­des que van y vie­nen. A dife­ren­cia de una resi­den­cia habi­tual, una pro­pie­dad turís­ti­ca nece­si­ta mate­ria­les que resis­tan mejor el paso del tiem­po, el trán­si­to dia­rio y el des­gas­te por hume­dad o lim­pie­za fre­cuen­te. Y todo esto, sin renun­ciar al esti­lo ni a una bue­na pri­me­ra impre­sión, cla­ve para cap­tar reser­vas y bue­nas rese­ñas.

Mate­ria­les que aguan­tan el rit­mo del alqui­ler vaca­cio­nal

En este con­tex­to, la elec­ción de mate­ria­les mar­ca una gran dife­ren­cia. Sue­los, pare­des, coci­nas y baños deben pen­sar­se no solo como ele­men­tos deco­ra­ti­vos, sino como super­fi­cies que van a enfren­tar­se a male­tas rodan­do, cal­za­do moja­do, cam­bios de tem­pe­ra­tu­ra, hume­dad cons­tan­te y lim­pie­zas inten­si­vas entre reser­vas.

Una de las solu­cio­nes más reco­men­da­das para estas situa­cio­nes son los reves­ti­mien­tos viní­li­cos, que com­bi­nan una esté­ti­ca muy cui­da­da con una resis­ten­cia nota­ble. Este tipo de mate­rial es ideal para zonas de alto trán­si­to como pasi­llos, coci­nas o salo­nes, y ade­más ofre­ce una gran tole­ran­cia a la hume­dad, por lo que tam­bién se adap­ta a baños y zonas exte­rio­res cubier­tas.

Su faci­li­dad de ins­ta­la­ción, lim­pie­za y man­te­ni­mien­to lo con­vier­ten en un alia­do ideal para quie­nes ges­tio­nan varias pro­pie­da­des o nece­si­tan inter­ve­nir en tiem­pos cor­tos entre reser­va y reser­va.

Ven­ta­jas cla­ve fren­te a mate­ria­les tra­di­cio­na­les

Com­pa­ra­do con opcio­nes como la made­ra natu­ral, los sue­los cerá­mi­cos o el micro­ce­men­to, los reves­ti­mien­tos viní­li­cos pre­sen­tan una serie de ven­ta­jas cla­ras:

  • Mayor resis­ten­cia a gol­pes, raya­du­ras y hume­dad
    Per­fec­tos para zonas don­de no se pue­de con­tro­lar el com­por­ta­mien­to del usua­rio ni las con­di­cio­nes del entorno.
  • Ins­ta­la­ción rápi­da y ver­sá­til
    Se pue­den colo­car sobre sue­los exis­ten­tes, lo que aho­rra tiem­po y redu­ce cos­tes de refor­ma.
  • Esté­ti­ca rea­lis­ta y adap­ta­ble
    Imi­ta aca­ba­dos de made­ra, pie­dra o cemen­to con una fide­li­dad visual sor­pren­den­te, per­mi­tien­do man­te­ner una ima­gen cui­da­da y cohe­ren­te con el esti­lo gene­ral.
  • Fácil lim­pie­za y man­te­ni­mien­to
    Un aspec­to esen­cial para quie­nes deben pre­pa­rar la vivien­da en pocas horas entre sali­das y entra­das de hués­pe­des.

Todo esto los con­vier­te en una solu­ción ideal para quie­nes bus­can un inte­rio­ris­mo pro­fe­sio­nal sin com­pli­ca­cio­nes.

Esti­lo y fun­cio­na­li­dad para todos los públi­cos

El dise­ño de inte­rio­res en vivien­das turís­ti­cas tam­bién debe adap­tar­se al tipo de via­je­ro al que va diri­gi­da la pro­pie­dad. Un apar­ta­men­to urbano para via­je­ros de nego­cios no nece­si­ta la mis­ma esté­ti­ca que una casa rural para fami­lias o una esca­pa­da román­ti­ca en la cos­ta.

Sin embar­go, hay ele­men­tos comu­nes que fun­cio­nan en casi cual­quier con­tex­to: colo­res neu­tros, tex­tu­ras natu­ra­les, ilu­mi­na­ción cáli­da y mobi­lia­rio fun­cio­nal pero cómo­do. A eso se le suma la elec­ción de mate­ria­les como los reves­ti­mien­tos viní­li­cos que per­mi­ten man­te­ner un ambien­te ele­gan­te sin com­pro­me­ter la dura­bi­li­dad.

Este tipo de enfo­que “todo terreno” es ideal para atraer a dis­tin­tos per­fi­les de hués­pe­des sin reha­cer la deco­ra­ción cada tem­po­ra­da.

Dón­de apli­car estas solu­cio­nes: zonas cla­ve

Los sue­los son, sin duda, el pri­mer lugar don­de apli­car mate­ria­les resis­ten­tes. La entra­da, el pasi­llo y la zona de estar reci­ben el mayor des­gas­te, y aquí es don­de un reves­ti­mien­to viní­li­co pue­de hacer la dife­ren­cia. Tam­bién son idea­les para coci­nas, que requie­ren lim­pie­za cons­tan­te y don­de el agua o las sal­pi­ca­du­ras son inevi­ta­bles.

En baños, se pue­de uti­li­zar el mis­mo tipo de vini­lo tan­to en el sue­lo como en par­te de las pare­des, apor­tan­do con­ti­nui­dad visual y faci­li­tan­do la lim­pie­za. Tam­bién se pue­den reves­tir zóca­los o zonas de con­tac­to fre­cuen­te, como la par­te infe­rior de la pared, tras la cama o tras la zona de desa­yuno, para pro­te­ger­las de roces o man­chas.

Ade­más, este tipo de solu­cio­nes se pue­den apli­car en pro­pie­da­des de cual­quier tama­ño: des­de estu­dios urba­nos has­ta casas con varias habi­ta­cio­nes, sin que el pre­su­pues­to se dis­pa­re ni se vea com­pro­me­ti­do el dise­ño.

Resis­ten­cia y dise­ño como ven­ta­ja com­pe­ti­ti­va

Inver­tir en mate­ria­les dura­de­ros como los reves­ti­mien­tos viní­li­cos no es solo una deci­sión esté­ti­ca, sino una estra­te­gia ren­ta­ble para el alqui­ler vaca­cio­nal. Redu­ce impre­vis­tos, faci­li­ta el man­te­ni­mien­to y mejo­ra la expe­rien­cia del hués­ped. A la lar­ga, esto se tra­du­ce en menos gas­tos de repa­ra­ción, mejo­res valo­ra­cio­nes y una ima­gen más pro­fe­sio­nal de la pro­pie­dad.

Los pro­pie­ta­rios que apues­tan por una deco­ra­ción fun­cio­nal y resis­ten­te no solo alar­gan la vida útil de su inver­sión, tam­bién logran des­ta­car fren­te a la com­pe­ten­cia con espa­cios que no solo se ven bien en las fotos, sino que fun­cio­nan en el día a día. Por­que en el turis­mo vaca­cio­nal, el dise­ño tam­bién ven­de… pero la dura­bi­li­dad fide­li­za.

Comparte esta publicación

amadomio.jpg

Suscríbete a nuestro boletín

Reci­be toda la actua­li­dad en cul­tu­ra y ocio, de la ciu­dad de Valen­cia